Cómo hacer un plan de negocios en 10 sencillos pasos

Crear un plan de empresa no es sólo un paso administrativo. Este documento sienta las bases para la toma de decisiones estratégicas, lo que lo convierte en una poderosa herramienta para toda pequeña o grande empresa.

Esta ayuda a transformar una idea de negocio online o física en un plan estructurado, a organizar las operaciones y a conseguir financiación. Sin embargo, puede ser un gran desafío redactar un plan de negocio por tu cuenta.

En esta guía, compartiremos 10 pasos que te ayudarán a hacer un plan de negocios eficaz. Con esta visión general, pretendemos ayudar a emprendedores a crear un negocio sin tantos obstáculos y a alcanzar el éxito financiero. 

Un plan de negocio o business plan es un documento formal que contiene información esencial sobre una empresa, incluidos sus objetivos y cómo alcanzarlos. Este documento puede ayudar al crecimiento del negocio y a conseguir apoyo financiero de inversores o un préstamo empresarial de un banco.

10 Pasos para redactar un plan de empresa exitoso

Sea cual sea tu idea de negocio, un plan elaborado te ayudará a convertirla en un éxito. En general, existen tres formatos para redactar un plan de negocio:

  • Plan de negocio tradicional: ofrece un plan exhaustivo de la estrategia y las operaciones de una empresa. Este formato incluye varios componentes de un plan empresarial, como el resumen ejecutivo, la descripción de la empresa, la solicitud de financiación y un apéndice.
  • Plan de negocio para startups: hace hincapié en la agilidad. Está estructurado en torno a una visión general de alto nivel de los aspectos empresariales clave mediante representaciones visuales y viñetas. Los elementos centrales cubren secciones como tus asociaciones clave, la propuesta de valor, las relaciones con los clientes, la estructura de costes y las fuentes de ingresos.
  • Plan de negocio operativo: se centra intensamente en los objetivos a corto plazo y el funcionamiento interno de una empresa. Abarca áreas como la producción, la gestión de inventarios, la logística de la cadena de suministro, la dotación de personal y los detalles de la ubicación.

En este artículo, nos centraremos en el formato de plan de negocios tradicional. Sin más preámbulos, acá cómo hacer un plan de negocios paso a paso. 

1. Empieza con un resumen ejecutivo

El resumen ejecutivo contiene una visión general de los elementos clave de tu negocio. Como es la primera sección, asegúrate de dejar una impresión fuerte que contenga la esencia y el enfoque de tu negocio.

Al elaborar un resumen ejecutivo, busca ser claro y persuasivo. Aquí tienes tres componentes que debe incluir tu resumen ejecutivo:

Propósito y relevancia

Un resumen ejecutivo ofrece una mirada instantánea de tu negocio y atrae a posibles socios o inversores para que exploren el plan con más detalle. Es tu oportunidad para destacar lo que distingue a tu empresa y por qué está orientada al éxito.

Habla de tu modelo de negocio, de tus objetivos clave y de la propuesta de valor única para tus clientes.

Declaración de objetivos

Tu declaración de objetivos es un componente fundamental del resumen ejecutivo. Es una declaración clara y concisa del propósito y los valores fundamentales de tu negocio. 

Además de reflejar lo que tu empresa pretende conseguir, una declaración de misión también inspira y motiva a tu equipo y a las partes interesadas. Una declaración de misión bien elaborada orienta los procesos de toma de decisiones y marca el tono de la empresa.

Visión general del negocio

Una buena descripción general proporciona una perspectiva de 360 grados de tu concepto empresarial. Esta breve descripción empresarial debe abarcar lo siguiente:

  • Misión: reitera tus objetivos empresariales y alínealos con la declaración de misión.
  • Ofertas: describe tus productos o servicios y destaca cómo satisfacen las necesidades del mercado o resuelven problemas concretos.
  • Liderazgo: presenta a los actores clave de tu empresa. Destaca su experiencia, sus funciones y cómo contribuyen al éxito empresarial. Este aspecto tranquiliza a los inversores sobre la capacidad y experiencia que respaldan la empresa.
  • Operaciones: aborda brevemente las estructuras funcionales de tu empresa. Incluyen la ubicación, la estructura y los procesos cotidianos que garantizan su buen funcionamiento. 

2. Escribe la descripción de tu negocio

El siguiente paso en la elaboración de tu plan de negocios es proporcionar la descripción empresarial. Esta sección analiza específicamente tu nueva actividad empresarial, el nicho que ocupa y su historia de fondo.

Partiendo de la base de tu resumen ejecutivo, la descripción del negocio debe abarcar su valor único y sus elementos fundacionales.

Detallar tu negocio

Comienza esta sección describiendo tu sector y tu nicho objetivo. Para destacar tu ventaja competitiva, define el problema que tu nuevo negocio pretende resolver y explica cómo tus productos ofrecen soluciones prácticas.

Algunos ejemplos de propuesta única de venta (USP) son un enfoque innovador, una tecnología superior y la excelencia en el servicio al cliente.

También es crucial plantear tu modelo de negocio, explicando cómo genera ingresos tu empresa. Detalla las distintas fuentes de ingresos de las que depende, como la venta directa de productos, los servicios de suscripción, los derechos de licencia y la publicidad.

Esta claridad ayuda a demostrar la viabilidad de tu modelo de negocio. Además, tanto si tu modelo se basa en transacciones únicas, pagos recurrentes o una combinación de métodos, estos detalles muestran cómo tus ofertas apoyan el crecimiento y la sostenibilidad.

Establecer la estructura jurídica y contar su historia

Aclarar la estructura jurídica de tu negocio es crucial para posibles inversores, socios comerciales y partes interesadas, ya que afecta a la responsabilidad, los impuestos y la flexibilidad operativa. Esta información te proporcionará una visión clara de la estructura jurídica y financiera de tu empresa.

Éstas son algunas de las estructuras empresariales más comunes:

  • Empresa unipersonal: implica que una sola persona es propietaria y dirige la empresa. El propietario recibe todos los beneficios, pero es personalmente responsable de todas las deudas y obligaciones de la empresa.
  • Sociedad colectiva: propiedad y gestión de dos o más personas que se reparten los beneficios. Puede ser general, en la que todos los socios comparten la gestión diaria y las responsabilidades o limitada, en la que algunos contribuyen económicamente pero no participan en la gestión y tienen responsabilidades limitadas.
  • Sociedad de responsabilidad limitada (SRL): permite la protección de la responsabilidad como una sociedad anónima y las ventajas fiscales de una sociedad colectiva. Los socios están protegidos de la responsabilidad personal por deudas y acciones, mientras que los beneficios pasan a la declaración de la renta individual.

Además, habla de la historia de la empresa para añadir profundidad a la evolución del negocio. Esta narración debe referirse a la fase actual de desarrollo, tanto si se trata de una pequeña empresa en sus fases iniciales como de una entidad establecida que explora nuevas oportunidades.

Aquí tienes algunas preguntas para responder:

  • ¿Cuándo se fundó la empresa?
  • ¿Cuáles fueron los hitos o momentos clave a lo largo de su trayectoria?
  • ¿Ha habido cambios significativos en la propiedad, fusiones o adquisiciones en la historia de la empresa?
  • ¿Cómo han evolucionado los productos o servicios de la empresa?
  • ¿Cómo se ha adaptado la empresa a los cambios del mercado o del sector?

3. Establece tus objetivos

Tras sentar una base sólida con el resumen ejecutivo y la descripción del negocio, es hora de escribir los objetivos de tu negocio.

Los objetivos sirven como punto de referencia para evaluar tu éxito y progreso: haz que sean ambiciosos y alcanzables.

Los criterios SMART, que significan Específico, Mesurable, Alcanzable, Relevante y Limitado en el tiempo, pueden proporcionar un marco sólido para establecer tus objetivos empresariales. Aquí tienes una visión más detallada del marco:

  • Específico: ten respuestas al qué, al por qué y al cómo. Un objetivo bien definido sería «aumentar las ventas del producto X en un 10% en los próximos 12 meses mediante campañas de marketing online específicas», en lugar de «aumentar las ventas».
  • Mesurable: cada objetivo debe tener una métrica cuantificable para controlar el progreso y los resultados. Por ejemplo, si tu objetivo es mejorar la satisfacción del usuario, puedes medirlo mediante encuestas de satisfacción del cliente y utilizar las puntuaciones como referencia.
  • Alcanzable: establece objetivos ambiciosos pero realistas. Asegúrate de tener en cuenta los recursos, el tiempo y las condiciones del mercado. Establecer objetivos alcanzables garantiza que tu equipo se mantenga motivado.
  • Relevante: tus objetivos deben ser acordes con la dirección estratégica y los valores fundamentales de tu negocio.
  • Limitados en el tiempo: cada objetivo necesita un calendario definido que ayude a priorizar las tareas.

Cuando fijes tus objetivos empresariales, implica a tu equipo en el proceso. Este enfoque colaborativo garantiza que los objetivos se basen firmemente en las capacidades operativas de tu negocio y que los miembros del equipo estén alineados y comprometidos con su consecución.

Además, revisa y ajusta periódicamente tus objetivos según sea necesario para reflejar los cambios en el entorno empresarial.

4. Realiza un análisis de mercado

Realizar un análisis exhaustivo del mercado es un elemento fundamental de la planificación empresarial. Este te proporciona una sólida comprensión del panorama general del sector y señala el potencial de tu negocio dentro de ese contexto.

Un análisis de mercado debe proporcionar una visión crítica de las tendencias del mercado, el potencial de crecimiento, la dinámica competitiva y las necesidades de los clientes. En general, el proceso implica estos pasos:

1. Visión general de la industria

Realiza un análisis exhaustivo del mercado para descubrir el tamaño, las tendencias clave y las perspectivas de crecimiento del sector de tu empresa.

Google Trends muestra la popularidad de las consultas de búsqueda en Google relacionadas con tu sector, lo que puede indicar tendencias y oportunidades crecientes.

Sitio web de Google Trends

Para obtener datos sobre diversas industrias, incluidos el tamaño del mercado, las tendencias y las previsiones, Statista es una excelente plataforma estadística para explorar.

Sitio web de Statista

Por su parte, IBISWorld ofrece informes exhaustivos sobre una amplia gama de sectores, que proporcionan información sobre el tamaño del mercado, las tendencias de crecimiento y el rendimiento del sector.

Sitio web de IBISWorld

Una vez que obtengas información, analiza las tendencias actuales que afectan al sector, como los avances tecnológicos, los cambios normativos y la variación en el comportamiento de los consumidores. Identificar estas tendencias en un plan de empresa es crucial para tu estrategia y posicionamiento.

También es vital destacar el potencial de crecimiento de la industria. Los datos y proyecciones de fuentes creíbles pueden respaldar tus afirmaciones sobre la dirección de la industria. Estos datos dan credibilidad a tu análisis y ayudan a ilustrar las posibles oportunidades de negocio.

2. Definición del mercado objetivo

Tu mercado objetivo está formado por los consumidores o empresas con más probabilidades de ser tus clientes. Centrarte en un mercado concreto te permite adaptar el desarrollo de tus productos, tus campañas de marketing y tus estrategias de venta a las necesidades y preferencias del mercado.

Identificar a tus clientes ideales es vital para dar forma a tu estrategia empresarial. Para definir con precisión este grupo, considera segmentar el mercado en función de:

  • Datos demográficos: incluye edad, sexo, nivel de ingresos y educación.
  • Psicográficos: demuestran los intereses, valores y estilos de vida de tu mercado.
  • Localización geográfica: explica los lugares físicos donde se encuentra tu mercado objetivo.
  • Comportamiento de compra: añade hábitos de compra, fidelidad a la marca o índices de uso del producto.

Supón que tu producto es una línea de cuidado de la piel de gama alta. En ese caso, tus clientes potenciales podrían ser mujeres de entre 30 y 50 años con ingresos superiores a la media de zonas urbanas que valoran los ingredientes orgánicos.

3. Análisis de las estrategias de la competencia y el posicionamiento en el mercado

Un análisis exhaustivo de la competencia te ayuda a comprender el panorama competitivo y a identificar tu propuesta única de valor. Este análisis debe identificar también las lagunas del mercado que tu negocio puede aprovechar.

Aquí los pasos generales para realizar un análisis de la competencia:

  1. Identifica a los competidores: empieza por investigar a tus competidores directos que ofrecen productos similares y a los competidores indirectos que abordan las mismas necesidades de los clientes con una solución diferente. Utiliza informes del sector, estudios de mercado y búsquedas en Internet para crear tu lista.
  2. Reúne información: averigua las estrategias de marketing de tus competidores con herramientas como SEMrush o Ahrefs. Las plataformas de opiniones de clientes como Trustpilot proporcionan información sobre sus puntos fuertes y débiles.
  3. Analiza las estrategias y el posicionamiento: para entender cómo atraen los competidores al mercado objetivo, fíjate en cómo se marcan junto con sus propuestas únicas de venta. También deberías tomar notas sobre sus modelos de precios, canales de distribución y tácticas promocionales.
  4. Incorpora el análisis FODA: en el caso de los competidores clave, realiza un análisis FODA para identificar sus puntos fuertes y débiles, así como sus oportunidades y amenazas. Este enfoque estructurado te ayuda a comparar directamente tu empresa con los competidores en varios frentes.
  5. Evalúa las lagunas del mercado: basándote en tu análisis, señala qué les falta a los competidores y cómo puede tu empresa llenar esas lagunas. Puede tratarse de una característica única, una estrategia de precios diferente o un segmento de clientes desatendido.

Una vez que hayas completado la lista de comprobación del análisis de la competencia, utiliza los datos para perfeccionar tu estrategia empresarial. 

Este paso garantiza que tus productos destaquen sobre los de la competencia y satisfagan las necesidades del mercado con mayor eficacia.

5. Enumera tus productos y servicios

La sección productos y servicios de tu plan de negocios es donde muestras el alma de tu negocio.

Esta sección debe hacer algo más que enumerar tus productos o servicios. Debe articular el valor que aportan a tus clientes y en qué se diferencian de los competidores. Aquí tienes algunos consejos para crear una sección de productos y servicios sólida:

Detallar productos o servicios

Uno de los pasos iniciales es redactar una descripción detallada del producto o servicio. Debe incluir las características, funciones y cualquier aspecto único que distinga a tu empresa.

Ve más allá de las especificaciones centrándote en las ventajas. Por ejemplo, en lugar de afirmar que un producto está fabricado con materiales de alta calidad, explica cómo esto garantiza su durabilidad.

También es el momento perfecto para destacar cualquier propiedad intelectual clave, como las tecnologías patentadas o los procesos de marca registrada vitales para tus productos o servicios.

Por ejemplo, si tu producto incorpora una tecnología patentada, describe brevemente su importancia y cómo mejora la funcionalidad o el atractivo del producto.

Resaltar las ventajas para el cliente

Explica cómo tus productos añaden valor a las vidas o negocios de tus clientes. Ya sea ahorrando tiempo, reduciendo costes, mejorando la salud o aumentando el disfrute, los beneficios deben ser claros y convincentes.

Por ejemplo, si tu servicio incluye atención al cliente personalizada, destaca cómo esto ofrece comodidad a los clientes. Si la propiedad intelectual contribuye a estos beneficios, como un algoritmo de software único o una fórmula patentada que mejora la eficacia, destácala también.

Este enfoque centrado en el cliente ayuda a que tu negocio sea más atractivo para tu mercado objetivo.

Conectar las ofertas con las necesidades del mercado

Necesitas tener un profundo conocimiento de tu mercado objetivo para promocionar eficazmente tus productos. Este proceso incluye identificar los puntos de dolor, los retos y los deseos de tus clientes potenciales.

Utiliza las ideas de tu análisis de mercado para ilustrar cómo tus productos o servicios, reforzados por tu propiedad intelectual, abordan directamente las necesidades de los clientes o las lagunas del mercado.

Por ejemplo, dado que el diseño de tu producto ecológico está patentado, explica cómo esta innovación patentada satisface la creciente demanda de productos respetuosos con el medio ambiente. Luego, ilustra cómo distingue a tus productos en un mercado abarrotado.

6. Desarrolla una estrategia de marketing y ventas

Partiendo de la base de tus ofertas de productos y servicios, explica cómo pretendes comercializarlos y venderlos.

Esta sección debe detallar tu enfoque para atraer y retener clientes mediante un plan de marketing estratégico y una iniciativa de ventas.

Estrategias de marketing

Tu estrategia de marketing debe servir como un plan de negocios integral que describa los canales, herramientas y tácticas que utilizarás para llegar a tu público objetivo. Aquí tres factores que debes tener en cuenta al desarrollar tu estrategia de marketing:

  • Canales: identifica los canales más eficaces para llegar a tu mercado objetivo. Éstos van desde las plataformas digitales como las redes sociales, correo electrónico y motores de búsqueda hasta los medios tradicionales como la prensa, televisión y radio. Elige los canales en función de dónde es probable que tus clientes objetivo vean tus mensajes e interactúen con tu marca.
  • Herramientas: habla de las herramientas que respaldarán tus esfuerzos de marketing y te ayudarán a ejecutar, gestionar y medir la eficacia de tus campañas. Incluyen software de automatización del marketing, sistemas CRM, herramientas SEO y plataformas de análisis.
  • Tácticas: describe las tácticas de marketing específicas que piensas emplear. Van desde el marketing de contenidos y las campañas en redes sociales hasta la publicidad de pago y las campañas de correo directo. Cada táctica debe tener un objetivo claro, como crear conciencia de marca o generar clientes potenciales.

Estrategias de venta

Mientras que los planes de marketing se centran en generar interés y clientes potenciales, las estrategias de ventas consisten en convertir esos clientes potenciales en compradores y mantener excelentes relaciones con los clientes. Cubre estos aspectos específicos:

  • Adquisición de clientes: define el proceso por el que convertirás a los clientes potenciales en nuevos clientes. Puede implicar esfuerzos de venta directa, embudos de venta online o distribución minorista. Desde el contacto inicial hasta el cierre de la venta, asegúrate de que cada paso está configurado para acercar al cliente potencial a la compra.
  • Estrategias de conversión: discute cómo persuadirás a los clientes potenciales para que realicen una compra, por ejemplo, con promociones de ventas, descuentos o pruebas gratuitas. También es esencial desarrollar un manual interno sobre cómo tu equipo de ventas debe tratar las discusiones y negociar los acuerdos.
  • Estrategias de retención: a menudo más rentable que la captación, la retención de clientes describe cómo piensas hacer que tus clientes vuelvan. Las estrategias pueden incluir programas de fidelización, seguimientos regulares e incentivos por compras repetidas.

7. Organiza la estructura de tu equipo

Una estructura de equipo bien definida es esencial para una toma de decisiones eficaz, un funcionamiento eficiente y la consecución de tus objetivos empresariales. Esta debe articular claramente quién dirige la empresa, sus funciones y cómo la composición general del equipo apoya tus objetivos estratégicos.

Equipo directivo

Tu equipo directivo puede ser un factor importante en el éxito de tu negocio. 

Por tanto, detallar las cualificaciones, la experiencia y las funciones de los miembros de tu equipo directivo es crucial para demostrar a posibles inversores, socios y otras partes interesadas que tu negocio está en manos capaces.

  • Cualificaciones y experiencia: destaca los antecedentes relevantes de los miembros de tu equipo directivo, como éxitos anteriores, experiencia en el sector y habilidades relevantes. Estos detalles aseguran a las partes interesadas que tu equipo posee los conocimientos y la experiencia necesarios para afrontar posibles retos.
  • Funciones y contribuciones: describe las responsabilidades específicas de cada miembro del equipo directivo y cómo contribuyen a los objetivos estratégicos de la empresa.

Marco organizativo

Más allá del equipo directivo, presenta una imagen clara de la estructura organizativa más amplia de tu empresa. Incluye los distintos departamentos, equipos y funciones que componen tu empresa y cómo se interconectan para apoyar sus objetivos.

  • Organigrama: una representación visual puede ser muy eficaz para ilustrar la jerarquía y las relaciones entre las distintas funciones y departamentos de tu empresa. Ayuda a las partes interesadas a comprender cómo está estructurado tu equipo y cómo fluye la información a través de la organización.
  • Apoyo a las operaciones empresariales: describe cómo tu marco apoya unas operaciones empresariales eficientes. También podría consistir en detallar las funciones de cada departamento y cómo colaboran para alcanzar los objetivos de la empresa.
  • Alineación con los objetivos: muestra cómo tu estructura organizativa apoya tus objetivos empresariales. Por ejemplo, si la innovación rápida es un objetivo clave, destaca cómo está estructurado tu equipo de investigación y desarrollo para fomentar la creatividad y acelerar los ciclos de desarrollo de productos.

8. Planifica la logística y las operaciones

La logística y las operaciones de tu plan de empresa detallan cómo funcionará tu negocio a diario. Esta sección debe esbozar los procesos operativos para la entrega eficiente de productos o servicios, la gestión eficaz de la cadena de suministro y el mantenimiento de estándares de alta calidad.

Operaciones diarias

Detallar las operaciones cotidianas fundamentales para la funcionalidad de tu empresa es un primer paso crucial. Para ello, describe el proceso de fabricación de los productos, la estrategia de aprovisionamiento para adquirir materiales y el planteamiento para prestar servicios, según corresponda a tu modelo empresarial.

  • Producción: en el caso de las empresas basadas en productos, describe el proceso de producción, incluidas las fases de producción, el equipo y la tecnología utilizados, y los plazos desde las materias primas hasta el producto acabado. Comenta cualquier técnica de producción innovadora o eficiencia que dé a tu empresa una ventaja competitiva.
  • Gestión de la cadena de suministro: describe cómo gestionarás tu cadena de suministro, incluyendo el abastecimiento de materias primas y la gestión del inventario. También debes revelar información sobre tus proveedores, estrategias de gestión de inventarios y cualquier plan de reserva para hacer frente a las interrupciones de la cadena de suministro.
  • Logística: explica cómo entregarás tus productos a los clientes. Incluye el embalaje, el almacenamiento y los métodos de envío. Si vendes servicios, incluye la programación, la ubicación y los mecanismos de entrega.

Medidas de control de calidad

Mantener unos estándares de alta calidad es importante para la satisfacción del cliente y el éxito a largo plazo. Para garantizar que tus productos o servicios cumplen las expectativas de los clientes y se adhieren a los puntos de referencia del sector, detalla lo siguiente:

  • Normas de calidad: resalta las normas de calidad exactas que mantendrán tus productos o servicios. Éstas podrían abarcar puntos de referencia internos procedentes de las opiniones de los clientes y las pruebas de los productos o normas externas establecidas por organizaciones del sector.
  • Procesos de control de calidad: haz pruebas periódicas en las distintas fases de producción y realiza auditorías de calidad. Asegúrate de comentar cómo abordarás los posibles problemas de calidad, incluidas las acciones correctivas y los procesos de mejora continua.
  • Cumplimiento: explica cómo garantizará tu negocio el cumplimiento de las leyes, reglamentos y normas del sector pertinentes, y cómo se integrará esto en tus procesos de control de calidad.

9. Analiza y haz una proyección financiera

Pasemos ahora a abordar la salud financiera y las proyecciones de tu plan de negocio. En esta sección es donde demuestras la viabilidad fiscal de tu nuevo negocio, detallando tu situación financiera actual, los costes significativos que planeas tener y tu rendimiento futuro previsto.

Al analizar, sé realista en tus estimaciones. Especifica claramente los supuestos que has hecho en tus proyecciones e incluye los mejores, peores y más probables escenarios para demostrar las perspectivas financieras de tu empresa.

Además de añadir credibilidad a tus proyecciones, esta estrategia demuestra que has considerado cuidadosamente las diferentes condiciones operativas y de mercado.

Análisis financiero actual

Antes de desarrollar futuros planes financieros estratégicos, es necesario realizar un análisis exhaustivo de la situación financiera de tu negocio. Esta visión debe contener:

  • Estructura de capital: esboza la estructura de capital de tu empresa, abarcando cualquier préstamo empresarial y financiación de capital, para dar una idea de tu estrategia y nivel de riesgo. Explica las condiciones de la deuda, los costes de capital y la estructura de las acciones, si procede.
  • Liquidez: indica la capacidad de tu empresa para hacer frente a las obligaciones a corto plazo. Incluye ratios corrientes y rápidos para demostrar los niveles de liquidez. Esta tranquilidad es vital para las partes interesadas, que necesitan saber que la empresa puede gestionar eficazmente el flujo de caja y los gastos imprevistos.
  • Rendimiento financiero histórico: resume el rendimiento financiero pasado, incluyendo cuentas de resultados, balances, un estado de flujo de caja, así como cuentas de pérdidas y ganancias. Estos datos son vitales para evaluar la salud y las tendencias financieras.

Proyecciones financieras

Se trata de previsiones que estiman las finanzas de tu empresa en el futuro. Las proyecciones financieras deben incluir:

  • Fuentes de ingresos: ofrece una descripción detallada de tus fuentes de ingresos e ilustra cómo estas fuentes pueden impulsar el crecimiento de tu empresa. La descripción puede incluir previsiones detalladas de los ingresos por ventas, tarifas de servicios, ingresos por licencias o cualquier otra fuente fundamental para tu modelo de negocio.
  • Informe de resultados: proyecta tu informe de resultados normalmente para los próximos tres a cinco años. Esta previsión debe incluir los ingresos, el coste de los gastos de explotación, los bienes vendidos, el margen bruto y el beneficio neto. También debes explicar tus previsiones de ingresos compartiendo el crecimiento del mercado, la estrategia de precios y el volumen de ventas.
  • Estados de flujo de caja: muestran cómo esperas que fluya el efectivo dentro y fuera de tu empresa a lo largo del tiempo para ayudar a las partes interesadas a comprender cómo planeas gestionar su liquidez y financiar sus operaciones. Los aspectos esenciales incluyen el flujo de caja operativo, las inversiones en activos y las actividades de financiación.
  • Balances: estos datos ofrecen una visión de futuro de los activos, pasivos y fondos propios de tu negocio. Ayudan a predecir la evolución de tu posición financiera teniendo en cuenta las actividades operativas y de inversión.

10. Detalla las necesidades de financiación y compila el apéndice

Cuando finalices tu plan de empresa, expón claramente tus necesidades de financiación y reúne todos los documentos justificativos.

Esta sección final es crucial para los posibles inversores y prestamistas, ya que aborda directamente la solicitud de financiación y el compromiso financiero que buscas. También proporciona las pruebas que respaldan las afirmaciones de tu plan de negocio.

Puntualizar las necesidades de financiación

Ten clara la cantidad que necesita tu empresa durante un periodo determinado. Después, desglosa cómo piensas asignar esos fondos a las áreas de tu empresa, que pueden ser desarrollo de productos, marketing, inventario, equipamiento y capital circulante.

Aquí tienes varios aspectos que debes considerar:

  • Usos previstos: tu plan de financiación debe alinearse con tus objetivos empresariales, planes de marketing, estrategias de ventas y capital circulante. Demostrar un vínculo claro entre la financiación y las iniciativas estratégicas tranquiliza a los posibles inversores sobre cómo la financiación ayuda a impulsar el crecimiento.
  • Retorno potencial de la inversión (ROI): los inversores y prestamistas quieren conocer el ROI potencial de tu empresa. Esboza tus resultados financieros previstos, como el crecimiento de los ingresos, la rentabilidad y el flujo de caja. Explica cómo estos resultados producirán rendimientos para los inversores a través de la participación en los beneficios, la revalorización del capital, el pago de intereses u otros medios.
  • Estrategia de salida: una estrategia de salida es vital para el capital riesgo o los inversores que buscan una rentabilidad clara. Puede implicar compras, adquisiciones, ofertas públicas u otros acontecimientos que proporcionen rentabilidad al inversor.

Compilar el apéndice

El apéndice sirve como depósito de todos los documentos de apoyo y la información detallada que validan el contenido de tu plan de empresa. Incluir estos documentos ayuda a establecer la credibilidad y permite a los lectores comprender mejor los datos que hay detrás de tu plan empresarial. 

El apéndice de un plan de negocio suele incluir:

  • Documentos legales: adjunta cualquier documento legal relevante, como documentos de registro de la empresa, licencias, permisos, patentes, derechos de propiedad intelectual, así como contratos clave con clientes y socios comerciales.
  • Currículos de los directivos clave: incluye los currículos completos de los miembros de tu equipo directivo para mostrar sus cualificaciones, experiencia y trayectoria de éxito.
  • Investigación de mercado: proporciona el informe completo de investigación de mercado que respalde tu análisis de mercado, incluyendo fuentes de datos, metodologías y conclusiones detalladas.
  • Información sobre productos/servicios: ofrece descripciones detalladas, especificaciones y fotos o dibujos de tus productos o servicios. Si procede, adjunta información sobre patentes, marcas registradas o derechos de autor.
  • Estados financieros y proyecciones: si tienes un negocio establecido, incluye versiones completas de tus estados financieros históricos, junto con proyecciones financieras. Este documento debe incluir las cuentas de resultados, los estados de flujo de caja y los balances.
  • Materiales de apoyo adicionales: dependiendo de tu negocio, incluyen especificaciones técnicas, investigaciones científicas, pruebas de la eficacia del producto, cartas de intención de clientes potenciales, testimonios u otros documentos que refuercen tu plan de empresa.

Consejo profesional

Antes de creer que tu plan de negocios está completo, tómate tu tiempo para revisarlo a fondo en busca de errores gramaticales, palabras mal escritas y cualquier incoherencia en los datos o el formato.

Además, pídele a un colega o mentor de confianza que también lo revise. Un plan bien pulido puede mejorar significativamente su eficacia y la impresión que deja en posibles inversores, socios comerciales y partes interesadas.

Conclusión

Un plan de negocio bien elaborado sienta unas bases sólidas para atraer a nuevos socios y partes interesadas. Este articula tu visión, estrategia operativa y plan financiero.

A lo largo de este artículo, nos hemos centrado en cómo crear un plan de empresa utilizando el formato tradicional. Hagamos una breve recapitulación de los pasos para elaborar un plan de negocios: 

  1. Empieza con un resumen ejecutivo: como esta sección proporciona una visión general concisa de todo tu plan de empresa, asegúrate de que deja una fuerte impresión.
  2. Escribe la descripción de tu negocio: profundiza en los aspectos fundacionales de tu empresa, incluido el modelo y la estructura empresarial.
  3. Establece tus objetivos: unos objetivos claramente definidos establecen una hoja de ruta para el éxito, guiando tus estrategias empresariales y tus esfuerzos operativos.
  4. Realiza un análisis de mercado: un conocimiento profundo de la dinámica del mercado, las necesidades de los clientes y el panorama competitivo sirve para tomar decisiones estratégicas y posicionar tu empresa para el crecimiento.
  5. Enumera tus productos y servicios: detalla tus ofertas para enfatizar el valor, destacando cómo satisfaces las necesidades de los clientes potenciales y cómo te distingues de la competencia.
  6. Desarrolla un plan de marketing y ventas: te ayudará a llegar a tu público objetivo y a convertir clientes potenciales en clientes.
  7. Organiza la estructura de tu equipo: una estructura organizativa bien definida garantiza la claridad de funciones y responsabilidades, fomentando la eficacia y la colaboración efectiva.
  8. Planifica la logística y las operaciones: proyectar tus procesos operativos garantiza que tu empresa pueda suministrar productos y servicios con eficacia.
  9. Analiza y proyecta las finanzas: este proceso es vital para evaluar la salud fiscal y la viabilidad de tu empresa, atraer inversores y planificar un crecimiento sostenible.
  10. Detalla las necesidades de financiación y compila el apéndice: repasa tus necesidades de financiación y respáldalas con datos y documentos detallados en el apéndice para solidificar tu plan de empresa.

Ahora que ya sabes cómo redactar un plan de negocio, estás en un buen punto de partida para conseguir apoyo y financiación. ¡Buena suerte! 

Cómo elaborar un plan de negocios – Preguntas frecuentes

Elaborar un plan de empresa es un paso crucial para garantizar el éxito y la viabilidad de tu empresa. Aquí responderemos a algunas preguntas comunes sobre cómo hacer un buen plan de negocios. 

¿Cuáles son los tres objetivos principales de un plan de negocios?

Un plan de negocios define principalmente tu negocio para identificar objetivos y estrategias clave, proporciona una hoja de ruta para las estrategias de crecimiento empresarial y comunica la propuesta de valor de la empresa a posibles inversores y partes interesadas.

¿Cuáles son los distintos tipos de planes de negocios?

Los planes de negocio varían en función del uso que se les vaya a dar y del público al que se dirijan: tradicional, startup y operativo. 

Cada uno de ellos sirve a objetivos diferentes, proporcionando documentos exhaustivos que detallan todos los aspectos del negocio, resumiendo los elementos clave de la empresa y gestionando internamente los objetivos y las operaciones empresariales, respectivamente.

¿Cuáles son algunos errores comunes en un plan de negocios?

Entre los errores más comunes están la falta de claridad o la complejidad excesiva, las previsiones financieras demasiado optimistas no respaldadas por un estudio de mercado realista y no identificar a los competidores potenciales y los retos del mercado en tu plan de empresa formal.

Author
El autor

Diego Vargas

Diego es comunicador social, especialista en publicidad digital que trabaja constantemente en mejorar sus conocimientos de marketing digital, enfocándose en contenido y SEO. Idiomas, series, libros y cursos en internet son sus hobbies principales, además de los deportes. Este es su perfil de LinkedIn.